La tecnología ahora nos permite acercarnos a la utopía de la
humanización de las máquinas, a la telematización de los cuerpos, y la
virtualización de las ciudades, desde hace varios años, el ser humano
se ha convertido en cíborg, somos seres que dependemos de la tecnología
y nuestros cuerpos están apoyados por dispositivos cibernéticos para su
funcionamiento. ¿Son estas máquinas capaces de permear en lo social, en
el tejido y poner en jaque al estado y al sistema, para contribuir a la
solución de problemáticas de la comunidad a través de la información?
A
partir de las ideas expuestas en supralíneas, nace el proyecto “H+ la
hipermáquina”, pieza que conjuga los sistemas automatizados,
información y acciones teleperformáticas, partiendo de la necesidad de
construir un sistema que permita cuestionarse críticamente el flujo de
información en los sistemas de comunicación actuales, el manejo de
datos, la cuantificación y estandarización de las personas y la gran
estructura de poder y violencia que vivimos en nuestra realidad.
Esta
pieza híbrida es en su estructura básica un bot, es decir un programa
informático que efectúa tareas automáticamente y de forma repetida en
internet (Berg, 2017), que busca, extrae, publica y genera información
en redes sociales, todo a partir de datos abiertos sobre las mas de 37,
000 mil personas desaparecidas en México.
El bot se
ejecuta e inicia con la extracción de datos de una base de información
con todos los registros de personas desaparecidas (Personas
desaparecidas, https://personasdesaparecidas.org.mx/db/db), el sistema
también rastrea a partir del nombre seleccionado de manera aleatoria,
fotografías de rostros relacionados por similitud y respetando el
homónimo, en Google, que después mediante un sistema de detección
inteligente, construye un rostro nuevo, de apariencia fantasmagórica,
como cuerpo que se diluye en el anonimato y el olvido, en la
masificación de la información y se disuelve en los otros y la
incertidubre informática, el cual se publica en twitter junto con el
nombre de la persona, fecha de desaparición y textos que varios
escritores han, desinteresadamente, colaborado con este proyecto.
Algunos de los textos que forman parte de los tweets son los siguientes:
La oscuridad, la tremenda oscuridad intáctil, inaudible,
impresencial separa- nos. Comparte: Lo has visto, delimita la tremenda
oscuridad, por favor.
no encuentro siquiera su memoria en el espejo de la recamara que a diario abraza su ausencia.
Su nombre puede leerse todavía en los muros descascarados,
en desmemoriadas listas de búsqueda
que se apilan entre costales de limones, inalterables como el pasado.
"No tenemos una patria,/ tenemos un paisaje,/ tenemos a los desaparecidos/ vivos en las entrañas"
Además el bot busca en Twitter, los perfiles homónimos que
pudieran existir relacionados con la persona desaparecida, con la
esperanza de encontrar o recibir alguna información, un rastro, o un
mensaje, por lo menos impactar a alguien con su mismo nombre, por el
momento sin respuesta.
Además, de que esta misma
información es enviada a una lista de correo que la hipermáquina genera
de manera aleatoria a partir de listas de nombres y apellidos.
Paralelamente a esta búsqueda incansable por parte del sistema, una
impresora térmica da cuerpo físico en el espacio expositivo a los
datos, imprimiendo cada 90 minutos, tiempo que tarda en desaparecer una
persona en México, información sobre las personas desaparecidas.
Este proyecto está apoyado por el programa Jóvenes Creadores del FONCA
2017-2018.
Gracias a quienes me han ayudado en el desarrollo y
textos:
Dorian Sotomayor,David Chávez,Jesús Adin Valencia e Iván Cruz Osorio.